1/2 kg de alubias chicharos.
2 Trozos de costilla de cerdo.
1 Trozo de tocino ibérico.
1 Trozo de hueso de jamón.
2 Chorizos.
2 Morcillas.
2 Patatas grandes.
1 Zanahoria.
1 Pimiento rojo.
1 Cebolla.
1 Diente de ajo.
Pimentón dulce.
Tomate frito.
1/2 Vaso de vino blanco.
1 Cucharada de pulpa de pimientos choriceros.
Agua.
Sal.
Pimienta negra molida.
2 Hojas de laurel.
Aceite oliva virgen extra.
Lo primero que debemos hacer la noche anterior, es poner los chicharos en un recipiente, cubrirlos con agua y dejarlos en remojo durante 12 horas.
Pasado ese tiempo, escurrimos el agua de las alubias y las colocamos en una cazuela amplia, juntos con las costillas, el tocino, el hueso de jamón y las hojas de laurel, y añadimos 1 litro de agua fría.
Dejamos hervir a fuego medio durante 1 hora aproximadamente.
Mientras ponemos a calentar un poco de aceite en una sartén, picamos la cebolla, el pimiento rojo, el diente de ajo y lo ponemos a sofreír a fuego medio.
Pelamos y cortamos la zanahoria y la añadimos al sofrito.
Añadimos la cucharada de pimentón dulce, removemos y rápidamente agregamos 3 cucharadas de tomate frito.
Salpimentamos y a continuación le añadimos el vino blanco, y dejamos evaporar el alcohol.
Pasamos el sofrito por la batidora y se lo añadimos a las alubias.
Dejamos hervir 30 minutos a fuego medio y añadimos los chorizos y las morcillas enteras.
Pelamos y cortamos las patatas en trozos generosos y las agregamos a la cazuela.
Ponemos 1 cucharadita de pimientos choriceros y rectificamos de sal.
Dejamos cocer a fuego medio durante 30 minutos mas, removiendo de vez en cuando para que no se pegue.
Se puede añadir agua a mitad de la cocción si fuese necesario.
Probamos si las alubias están tiernas y apartamos del fuego.
Troceamos los chorizos y las morcillas y las devolvemos a la cazuela.
Dejamos reposar y servir.
Un buen provecho, un par de risas y un buen café.
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